sábado, 26 de agosto de 2023

ESA NOCHE

 

Miró por la ventana, seguía lloviendo, era esa lluvia de primavera que tanto disfrutaba en otro momento, pero los tiempos estaban cambiando para él. Estaba sentado melancólico, pensando que hacer esa noche, ya era pasada la medianoche, pero no podía dormir, a pesar de que tenía que trabajar al otro día, sabía que esa iba a ser una larga noche. Fue hasta la cocina, pensó en tomar una cerveza, pero prefirió tomar esa última botella de refresco, ahí sintió que necesitaba salir, cerró la puerta de la heladera y pasó por su escritorio, tomó las llaves del auto, la caja de cigarros, vio que tenía pocos, por lo que saco del cajón una caja, por si acaso.

Bajo la escalera de su apartamento y fue hasta el taller que estaba debajo, la lluvia parecía disminuir en su intensidad, abrió la puerta del garaje, se sentó en su auto, el asiento de conductor de su Volskwagen Golf GTI siempre le hacía sentir que era su lugar seguro.

Salió conduciendo suave por la ciudad, sin un rumbo fijo, sonaba en la radio una lista que siempre tenía lista para acompañarlo mientras manejaba. Siempre que salía a manejar sin sentido, terminaba pasando por esa esquina, el semáforo estaba en rojo por lo que pudo mirar un poco a su alrededor, vio ese lugar en particular, el recuerdo seguía ahí, el dolor estaba más presente, una lagrima corrió por su mejilla, pero rápidamente tuvo que prestar atención, porque la luz había cambiado a verde, puso primera, piso el acelerador y salió.

Paró a buscar otro refresco, y mientras miró sus redes por costumbre, noto que ella estaba en línea, y decidió escribirle. “Estoy a la vuelta, sale algo a esta hora”, la respuesta fue “si, pásame a buscar, te espero abajo”. No paso mucho tiempo desde la respuesta hasta que estaba estacionado frente a la puerta de su edificio, ahí estaba ella esperando, bajo un pequeño techo protegiéndose de la lluvia, corrió hasta el auto y se subió. Un poco mojada lo miró y le sonrió antes de darle un beso.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

LA LUZ DE SUS OJOS

Poco a poco la luz de sus ojos se iba apagando, había perdido el brillo que siempre irradiaba, esa que iluminaba todo a su paso, ya no era lo mismo.
Desde que su amiga había partido, ella estaba sin sentido, ese sostén que la hacia fuerte había desaparecido.
Esos momentos difíciles su amiga le hacia falta, no sabia que hacer y solo se tiraba a llorar por horas, sin consuelo, la extrañaba sin remedio. Su amiga, su consejera, su hermana de la vida, la había dejado, y el tiempo solo ahondaba la herida.

Poco a poco esa alma que irradiaba felicidad se iba apagando. Tenia buenos y malos momentos, pero siempre le faltaba algo, faltaba esa compañía con quien compartirlo todo.

Ni la tristeza ni la melancolía, pudieron dejar que él notara su belleza, pero tampoco pudo evitar su alma en pena. Romántico empedernido, grande de corazón quiso ser parte de su vida y su alma ayudar a curar, pero ella en su dolor se lo impedía.

Fueron largas noches de insomnio, de lagrimas derramadas, por la soledad, sin que ella supiera que de a poco, ese casi extraño intentando ser un amigo, se iba enamorando.
Fueron esas noches, que empezaron a compartirlo todo, horas y horas de charla, el intentando animarla, acompañarla y enamorarla, pero solo conseguía consolarla, le hizo saber que estaba a su lado, y que sin ella no iría a ningún lado.

Mientras el moría de amor por ella, ella moría de pena por haberse quedado sola, sin la compañía de esa hermana que la vida le había regalado y tan cruelmente se la había quitado.


Fue una noche de verano, una larga caminata, una cerveza en un bar alejado, son solo un viejo cantinero como testigo, que dejo a la radio como la peor banda sonora que pudiera elegir. Eran solo ellos dos,  el dolor de ella y la esperanza de él se juntaban cada vez más, cuando una lagrima calló por su mejilla y el delicadamente se la quito, mirándola fijamente a los ojos. Ella le devolvió la mirada, no necesito ninguna palabra más, entendió en ese momento porque él estuvo tanto tiempo a su lado sin esperar nada a cambio, y ella le devolvió una sonrisa, esa que le debía desde hacia ya un tiempo.

sábado, 28 de septiembre de 2013

EN SU MIRADA

Ella lo miro a los ojos, temerosa de lo que pudiera pasar, no quería que ese sentimiento se interpusiera entre ellos una vez más, por eso no dijo nada, simplemente se calló, lo miro a los ojos y le sonrió, él mientras tanto incrédulo, le devolvió esa sonrisa de manera muy sincera, realmente la amaba y no podía negarlo más, ese sentimiento lo había atormentado durante meses, por fin había podido serle franco y estaban juntos.

Era la mesa de ese bar, que habían elegido para salir, para conversar y desde ahí empezar, algo nuevo, hubo algo anterior, pero este era un nuevo comienzo, estaban aprendiendo de los errores del pasado y no iban a dejar pasar esta oportunidad. El la tomo de la mano le dijo otra vez, que la amaba, que su belleza lo deslumbraba pero era su personalidad lo que lo había enamorado perdidamente. Era su actitud ante la vida que a veces lo intimidaba, pero sabía que ella era sensible, tierna y romántica, aunque cuando se enojaba sacaba u lado fuerte, gritaba, se imponía y hacia que nadie quisiera ser la causa de su mal humor. Le dijo todo lo que era ella para él, era todo, pero ella seguía teniendo dudas, lo quería pero no lo amaba, quería estar con él, pero no estaban al mismo nivel de compromiso en esa relación. Ella tenía dudas, no quería lastimarlo, pero sabía que había alguien más en su corazón, una persona que le causo mucho dolor, y que ahora quería olvidar, no quería que esa relación se convirtiera en algo que no era verdadero.

Decidieron salir del bar a caminar, a recorrer la ciudad, que una noche de primavera, en medio de la semana a esa hora, era tranquila ya no había nadie, podían caminar un poco para despejarse, conversar y saber si podían hacer algo más. Al borde del rió era el lugar ideal, para estar tranquilos, él la volvió a mirar a los ojos como toda la noche, le acomodo el pelo por detrás de la oreja, mientras ella no pudo sostenerle la mirada, cedió, bajo la guardia y fue ahí cuando la beso, un beso largo y sincero, un beso que calló el ruido de la ciudad y de sus pensamientos, un beso que alejo todo lo malo e hizo de ese instante perfecto, nada lo interrumpió, nadie los molesto a ellos nada les importo, fue un instante o fueron horas, eso no les importo, fue ese momento que acallo las dudas en la cabeza de ella, sabía que era él.

No sabía si seria para siempre, no sabía cuánto duraría, pero ahora tampoco le importaba, lo volvió a mirar a los ojos como en el bar, pero las dudas  habían desaparecido, él la miro a los ojos y la abrazo, ella se sintió contenida, protegida y amada.

martes, 3 de septiembre de 2013

TORPE ENAMORADO

No sé en qué pensé, no sé cuando fue, no sé cómo pasó, fue algo que me inspiro, tu mirada o tu sonrisa, tu personalidad quizás fue lo que me impacto.
Nunca supe en realidad, nunca entendí la verdad, si supiera que es lo que sucedió, si supiera entender mi realidad, si pudiera entender la verdad.
Cuando en llegó el momento de decir grandes frases, de un discurso sincero y profundo, solo me quede con lo sincero, con palabras torpes de un adolescente enamorado, que no puede entender que es lo que pasa. No supe, no sé y pero si espero saber cómo poder decirte todo lo que siento, porque si me vuelvo un torpe chico enamorado a tu lado, es porque en eso me he convertido por ti.

Porque es tu mirada, es tu sonrisa, pero sobre todo tu personalidad la que me impresiona, la que me enamora.